Nadie está libre de riesgos: Todos estamos expuestos a sufrir el robo de nuestro auto, de sus accesorios o un accidente. Y lo que es peor, las consecuencias son imposibles de predecir. La reparación de tu auto y el de los otros involucrados en un siniestro, puede resultar de un altísimo costo. Inclusive, pueden terminar personas lesionadas o fallecidas.
De hecho, en Chile alrededor de un 40% de los vehículos tiene un siniestro al año, lo que significa que de los tres millones de autos que hay en nuestro país, cerca de un millón 200 mil chocan anualmente, lo que da un promedio de 100 mil siniestros al mes.
El lado positivo de esto es que –por suerte– hay una solución: contratar un seguro automotriz para manejar más tranquilo. Hay distintos tipos de seguro de auto en base a las coberturas que ofrecen, pero por muy simples que sean responderán mejor que tu propio bolsillo. Un seguro de automóvil funciona como un instrumento de ahorro y protección ante riesgos determinados.
Al contratar uno, debes considerar estar protegido ante aquellos gastos que no puedes afrontar, como un accidente con daños contra terceros muy altos, o pérdida total de tu vehículo. De esta forma te haces cargo sólo de los gastos menores, obteniendo interesantes ahorros.
Para comprar un seguro de forma fácil e informada, y no pagar de más, en nuestro sitio puedes comparar los precios y coberturas de las distintas compañías de seguros, para luego contratar en línea la más conveniente. La idea es que realices una compra inteligente y a tu medida, con toda la información que hay en el mercado.
Algunas coberturas a las que puedes acceder son:
• Daños materiales que afecten a tu auto.
• Daños ocasionados a terceros y responsabilidad civil.
• Robo total de tu auto.
• Perjuicios causados por actos maliciosos.
• Robo de accesorios.
• Perjuicios causados por fenómenos naturales.
• Asistencia en ruta en caso de avería o panne.