La fatiga al volante es esa sensación de cansancio que solo hace que quieras acostarte a dormir, no representa ningún problema mientras estás en casa, pero sí cuando estás al mando de tu vehículo.
Síntomas de fatiga al volante
Los síntomas de fatiga al conducir son muy diferentes y, generalmente, se sienten varios a la vez. Tu vista se comienza a nublar y ves borroso, pues tienes los ojos irritados o doloridos; bostezas a cada instante, puedes tener algún mareo o alucinación (sobre todo cuando estás a punto de dormirte), y el sueño te hace perder la concentración, por lo que no puedes permanecer alerta. Todo esto hace que tus reacciones sean más lentas, no puedas mantener la velocidad de conducción, te cueste cambiar de marcha y, sobre todo, pisas las líneas y te desvías.
Consejos frente a la fatiga al volante
1) Si vas a emprender un viaje largo, solo sal a la ruta luego de haber descansado y dormido debidamente.
2) No consumas medicamentos antes de partir, porque algunos remedios provocan somnolencia y disminución del sentido de alerta provocando fatiga al volante.
3) Haz paradas cada 150 o 200 kilómetros para descansar y estirar las piernas.
4) Bebe abundante agua mientras conduces para favorecer la hidratación, y nunca gaseosas ni bebidas alcohólicas.
5-Mantén tu vehículo ventilado para una correcta oxigenación y no sentir el sopor del encierro al conducir.
6) Conduce con ropa holgada y en una postura cómoda.
En el caso de que la fatiga al volante sobrevenga, no te empeñes en permanecer despierto y seguir adelante, pues puedes sufrir un accidente. Mejor elige un sitio en donde poder parar y descansar para poder seguir. Y por supuesto, aplica los 6 consejos de los que recién hablamos.
Recuerda que es tu responsabilidad descansar antes de salir, al igual que conducir un vehículo que cumpla con todas las normas de seguridad y que tenga un seguro de auto al día por cualquier eventualidad.