Si piensas comprar un auto de segunda mano, pero no estás seguro de que podrás adquirir uno en buen estado. En este post te contaremos en que fijarse al comprar un auto usado y algunos otros consejos para hacer una buena inversión.
La decisión de dónde comprarlo es también importante en diversos aspectos, como es el precio, la garantía, mayor seguridad en las condiciones del auto y algunos otros. No olvides también la importancia de contratar y cotizar un seguro de auto para proteger tu inversión.
En Compara queremos brindarte toda la información para saber en que fijarse al comprar un auto usado, las revisiones, aspectos, y principales puntos que deberías tener en cuenta a la hora de comprar un auto usado, para que siempre hagas una buena compra e inversión.
Dónde comprar un auto de segunda mano
Son varias las opciones para efectuar la compra de un auto de segunda mano, cuyos beneficios o desventajas se señalan en cada caso:
Opción 1: Con agencias de autos. Precios generalmente más elevados, pero con una garantía por escrito por un determinado tiempo. En muchos casos, también está la facilidad de obtener créditos para la compra.
Opción 2: Directamente con particulares. La compra de un auto a un particular implica una desventaja principal que es la de no contar con una garantía. Sin embargo, tiene la ventaja de que es posible encontrar un precio más bajo que en una agencia, especialmente si la venta se hace por alguna urgencia económica. Usualmente el pago se debe efectuar de contado. Este tipo de compra se puede hacer en persona, a través del teléfono o incluso por Internet, solicitando el envío desde alguna otra ciudad. Pero, hacerlo a distancia limita obviamente la revisión del vehículo.
Revisión de documentos del vehículo usado
Esta revisión, en apariencia rápida, debe extenderse a una consulta con el departamento de vialidad para detectar si hay infracciones sin pagar, reporte de robo y algunos otros adeudos o problemas que podrías absorber en caso de efectuar la compra. Los documentos deberán estar a nombre del vendedor, quien deberá identificarse plenamente para evitar sorpresas.
Revisiones de apariencia
El aspecto de un auto no afecta su funcionalidad. Aun así, siempre es importante que luzca bien para que puedas sentirte más a gusto con tu compra. Algunos de los puntos a revisar son:
– Daños en la carrocería o evidencia de reparaciones que indiquen que el vehículo pudiera haber estado involucrado en algún accidente. Aunque visiblemente resulte poco notorio, existe la factibilidad que haya afectado algunas otras partes del vehículo que perjudicarían el funcionamiento. Uno de los mejores indicadores para darte cuenta es un cambio en la tonalidad de la pintura.
– Luces auxiliares rotas u otras partes plásticas cuyo precio de reposición pueda ser elevado.
– Puertas niveladas. Si las puertas no cierran bien o lucen caídas, también pueden indicar la ocurrencia de un accidente.
– Estado de las gomas. Los neumáticos son importantes para la seguridad de los pasajeros, por lo que debe revisarse el desgaste y si existen deformaciones que indiquen una falla grave.
– Estado de parabrisas, vidrio trasero y otros cristales. La revisión se debe de hacer estando bien limpios para detectar incluso pequeñas marcas que suelen crecer con la vibración.
– Presencia de óxido. Es importante revisar el chasis y las partes internas para detectar presencia importante de oxidación.
– Estado de los asientos. Todos los interiores son importantes, pero la comodidad y vestiduras de los asientos están dentro de las principales cosas a revisar.
La mayoría de los problemas que puedas detectar no son precisamente para descartar la compra del auto, sino para poder llegar a un precio más bajo considerando que debas realizar las correcciones. Esto, con excepción de las evidencias de un accidente grave, en cuyo caso será mejor que busques otro auto.
Fugas de líquidos
Un vehículo en buen estado no debe presentar fugas de líquidos de ningún tipo, lo que indicaría la presencia de alguna falla que pudiera ser necesario reparar a corto plazo.
– Anticongelante o sistema completo de enfriamiento del motor. Lo menos grave puede ser el cambio de una manguera, aunque pudiera implicar un nuevo radiador. Es importante revisar también el nivel del líquido en el recipiente.
– Aceite de transmisión. Cualquier evidencia de fuga puede ser un problema grave.
– Aceite de motor. El costo de reparación por fugas en los empaques del motor puede ser muy oneroso, además de que podría hasta dañarse el motor y requerir de uno nuevo. Es importante también revisar el nivel y apariencia del aceite para comprobar los cuidados que haya tenido el dueño.
– Líquido de frenos. Las fugas pueden indicar fallas en las partes importantes del sistema de frenado o requerir simplemente de nuevas mangueras.
– Aceite de amortiguadores. Una fuga indicará la necesidad de un cambio, aparte de afectar el sistema de suspensión y poder dañar otras partes del auto.
Aspectos mecánicos y eléctricos del auto usado
Diversos puntos del auto te pueden indicar las condiciones generales y cómo ha sido tratado:
– Correas. El desgaste de éstas te da una idea del tiempo que pasará para que necesites hacer los cambios o reparaciones.
– Sonidos extraños. Con el motor encendido, podrás escuchar desde el funcionamiento del motor hasta diversas vibraciones y ruidos que pueden indicar la presencia de un problema. No olvides hacer una prueba completa manejándolo a diversas velocidades, probando el frenado y haciendo todos los cambios para que puedas detectar alguna falla.
– Indicadores de velocidad, luces y funcionamiento en general. Las luces son parte importante del vehículo y deberán operar todas de manera adecuada, además de los controles internos para nivel de gasolina, calentamiento del motor y otros, para que puedas detectar cualquier falla.
No olvides también probar la bocina (claxon) y el sistema de cada ventana, tanto si son eléctricas como mecánicas.