Un automóvil es una inversión que necesitas cuidar, pues representa una ventaja en pro de tu calidad de vida. Sin embargo, hay muchos hábitos que, aunque sean bien intencionados, en realidad no son más que mitos que poco bien hacen en el mantenimiento del auto y que incluso, pueden resultar perjudiciales para tu bolsillo y para el bienestar de tu auto, o de la utilidad del Seguro Automotriz que contrataste para él.
Mito 1: La gasolina premium es la mejor
Realidad: A menos que tu vehículo especifique lo contrario, cargar el tanque con gasolina de alto octanaje no mejorará el rendimiento ni la velocidad de tu auto. La mayoría de los autos funcionan perfectamente con combustible de menos grado, que actualmente tienen una formulación libre de partículas que protegen los motores. La gasolina premium sólo afectará tu economía.
Mito 2: Si pierdes el control del auto, bombea el freno
Realidad: Este mito surgió en el pasado, cuando los autos tenían frenos de tambor y se necesitaba que el conductor presionara varias veces el pedal de freno para evitar que se bloquearan. Los autos modernos cuentan con un sistema de anti-bloqueo de frenos automáticos, que funciona con celeridad y es muy seguro. Si frenas de golpe cuando pierdes el control del vehículo, es probable que termines girando y saques el auto de su dirección.
Mito 3: Con una moneda puedes saber si el neumático está desgastado
Realidad: Este mito asegura que si recorres con el canto de una moneda el surco del neumático y puedes ver la cabeza, es necesario cambiarlo. Esto no ofrece ninguna seguridad, pues los modelos de neumáticos son diferentes y la altura de los surcos no son mayores indicadores. Es mejor que los reemplaces cada 40.000km.
Mito 4: Debes calentar el auto antes de salir
Realidad: Los autos modernos cuentan con motores que están listos para arrancar apenas se enciende, aún en los meses más fríos, a menos que desees calentar el interior antes de partir. Encender el motor del auto durante largo rato sólo te hará desperdiciar bencina.
Si evitas estos viejos hábitos harás una diferencia que se notará en tu economía. Sin embargo, no olvides realizar revisiones rutinarias en manos de profesionales. Asimismo, ten siempre a la mano un buen seguro de auto que garantice tu seguridad y la de tu vehículo.